La campaña electoral en Francia nos indica, una vez más, que una
parte muy importante de la población quiere soluciones radicales y de
izquierda para salir de la crisis. Prueba de ello, es la enorme cantidad
de asistentes a los mítines de Jean Luc Melenchon y de Francia
Insumisa, así como los resultados de las encuestas sobre la intención de
voto. Por supuesto, solo cabe alegrarnos. Este aumento a favor de las
ideas radicales, más allá de la desobediencia a los tratados europeos,
es un buen signo. Las candidaturas de Philippe Poutou y de Natalie
Arthaud, ambos de extrema izquierda, están suscitando también una
verdadera simpatía. Y el discurso de Philippe Poutou contra François
Fillon y Marine Le Pen, durante el debate televisado del 4 de abril de
2017, despertó mucho interés incluso allende las fronteras francesas.
Setenta
personalidades y militantes de 19 países europeos provenientes de
diferentes formaciones de izquierdas como Podemos, Izquierda Unida,
Bloco d’Esquerda portugués, Parti de Gauche y NPA franceses, Unidad
Popular y Antarsya en Grecia, de la izquierda radical danesa a la de
Chipre, pasando por la de países como Eslovenia, Bosnia, Paises Bajos,
Alemania o Hungría han firmado‘Los retos de la izquierda en la zona
euro’, un manifiesto inspirado por Éric Toussaint (portavoz CADTM
internacional), que llama a tener el coraje de desobedecer las órdenes
de las autoridades y los tratados europeos.
Nenhum comentário:
Postar um comentário