La crisis actual muestra no solo el carácter despiadado del capitalismo liberal y financiero -despiadado en el sentido de que lo único que le importa es sacar el máximo beneficio en detrimento del derecho y de la vida de millones de seres humanos explotados, excluidos y humillados por el desempleo-, sino también la dramática impotencia de las fuerzas progresistas y, muy en particular, de la izquierda europea para ofrecer una alternativa creíble frente a los errores de este sistema.
Nenhum comentário:
Postar um comentário