Los miembros del G7 acaban de terminar su 41ª cumbre. Los dirigentes de Canadá, Francia, Alemania, Italia, Japón y Reino Unido se reunieron en un gran palacio bávaro, el castillo Elmau. Fue un sitio adecuado para los amos del universo.
Afirman que el mantenimiento del orden mundial es su pasatiempo. De hecho, lo que más les interesa es la preservación de su poder a cualquier precio.
La primera cumbre del G7 tuvo lugar en 1974 en el castillo de Rambouillet, un gran palacio feudal en Francia. El propósito de esa cumbre fue que los estados del G7 encontraran una estrategia común para hacer frente al cártel petrolero de la OPEC y el NIEO, el Nuevo Orden Económico Internacional.
La OPEC había limitado el suministro para aumentar el precio del petróleo crudo, lo que amenazaba el crecimiento económico de los países industriales avanzados. El NIEO había sido aprobado en la Asamblea General de las Naciones Unidas con el apoyo de los estados del Tercer Mundo.
Propugnaba una nueva arquitectura económica y política internacional para beneficiar a las naciones más pobres. El G7 se creó para desbaratar a la OPEC y el NIEO. Ha tenido éxito en gran parte.
Nenhum comentário:
Postar um comentário